HABÍAN SIDO INVESTIGADOS POR IRREGULARIDADES EN EL COMBUSTIBLE
La FIA exculpa a BMW y Williams y zanja el último sobresalto
Todo quedó en un golpe de efecto en una temporada que ha tenido muchos. Uno de los comisarios deportivos que han juzgado la última polémica adelantó que no habrá sanción, tal y como confirmó posteriormente un comunicado de la FIA, para los equipos BMW-Sauber y Williams-Toyota, que fueron investigados tras el Gran Premio de Brasil por presuntas irregularidades con el combustible. La decisión era vital, ya que dejaba a Kimi Raikkonen, ganador en la pista, como campeón, o le daba el título a Lewis Hamilton. Si hubiera sanción, no afectaría a los pilotos.
La investigación se centró en la temperatura del combustible tras la carrera de los dos Williams, pilotados por Rosberg y Nakajima, y los dos BMW, en manos de Kubica y Rosberg. En un primer estudio, se dijo que estaría por debajo del límite de diez grados por debajo de la temperatura ambiente, lo que daba a indicar que el combustible se habría congelado para favorecer el rendimiento de los motores. Sin embargo, La FIA no sancionó por falta de pruebas suficientes para demostrar si el combustible había sido alterado (congelado) y dejó la clasificación como la carrera de Interlagos había dictado.
Si los pilotos hubieran sido sancionados, Hamilton habría recuperado tres puestos, ya que Rosberg, Kubica y Heidfeld acabaron la carrera cuarto, quinto y sexto, respectivamente, y se habría proclamado campeón. No ha sido así, aunque esta temporada ha sido loca hasta el final.
2007